Se calienta la carrera por el hidrógeno verde en la región: Ecuador traza su hoja de ruta e incluso podría exportar el combustible

La carrera por el hidrógeno verde se intensifica cada vez más. En esta oportunidad, Ecuador decidió no quedarse atrás y presentar su propia hoja de ruta para producir y usar el llamado "combustible del futuro", con el objetivo de avanzar en el fortalecimiento de la transición energética en el país. 

La tarea está a cargo del Ministerio de Energía y Minas en coordinación con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), con la viceministra de Electricidad y Energía Renovable, Enith Carrión, a la cabeza.

La funcionaria explicó que “para avanzar en este proceso de transición, el Gobierno de Ecuador trabaja en aumentar la energía renovable no convencional (ERNC) en nuestra matriz energética, incorporando mayor eficiencia en los sistemas energéticos, reduciendo el uso de combustibles fósiles para promover mayor acceso a la electricidad, la integración a sistemas energéticos de la región y mejorar la seguridad y resiliencia energética”.

Con todo esto, Carrión recalcó que “esta implementación, resulta una oportunidad fundamental para descarbonizar sectores de la economía, como la industria y el transporte, a fin de hacerlos más sostenibles y en consecuencia reducir tanto el consumo de combustibles fósiles, como las emisiones de contaminantes atmosféricos, dióxido de carbono (CO2) y metano (CH4) principalmente”.

Durante el lanzamiento de la hoja de ruta, la directora del proyecto de la consultora alemana Fichtner indicó que Ecuador cumple con los tres criterios que requiere un país para convertirse en productor de hidrógeno verde. “El país tiene recursos renovables para su producción, tiene acceso a recursos hídricos adecuados, tiene una demanda que puede incrementarse a futuro y tiene acceso al Océano Pacífico para cubrir la demanda de exportación y cuenta con infraestructura adecuada, que habrá que adaptar para concordar con la hoja de ruta”, dijo.

De acuerdo con el Ministerio de Energía y Minas, la meta radica en convertir el hidrógeno verde en un vector energético competitivo y amigable para el ambiente; y, al mismo tiempo cumplir con los compromisos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, y de esta forma contribuir a reducir el calentamiento global.

El hidrógeno verde, puede ser utilizado como un combustible sostenible y convertirse en una fuente energética clave para alcanzar la descarbonización del planeta y combatir el cambio climático, pues no genera emisiones contaminantes.

Al respecto, la jefa de operaciones del BID, Adriana La Valley,  destacó los recursos energéticos que mantiene el país para impulsar energías renovables. "A través de la implementación del hidrógeno verde, Ecuador avanza hacia su seguridad energética".

Con este paso, Ecuador incursiona en la producción y uso del hidrógeno verde como nuevo combustible, el cual incluso podría exportar y generar nuevos ingresos para el país de manera amigable con el medioambiente.