Las nuevas tendencias de la oferta comercial en Montevideo: locales como punto de retiro de venta online o varias tiendas de menor tamaño

La avenida 18 de Julio, calle principal de Montevideo en Uruguay, es históricamente un clásico sector de compras. Si bien antes los locatarios del lugar apostaban solo a las ventas presenciales, con el pasar del tiempo, el auge del comercio electrónico y la pandemia llevaron a que las tendencias cambiaran. 

De acuerdo con datos de la Cámara Inmobiliaria Uruguaya, gran parte de los locales, sobre todo de medianas y pequeñas empresas, ya no son punto de venta directo al público, sino que su modelo de negocios se basa en ser un punto de retiro de mercadería para las ventas online. 

Así, bajaron los precios de los arriendos, y los medianos emprendedores pudieron alquilar otros tipos de locales que antes se llevaban las empresas grandes -de unos 500 m2-, para operar como centro de distribución o showroom, todo en el mismo lugar.

“Se dinamizaron mucho los locales, se ve un movimiento constante. Eso sí, a las empresas grandes les hacen contrato de cinco años y a los más chicos de uno a dos por la incertidumbre de cómo les va a ir”, comentó a DFSUD, Matías Medina, vicepresidente de la Cámara. 

Dentro de la industria, quienes están ocupando la oferta disponible son en su mayoría tiendas de ropa, cafeterías y, en menor medida, de electrodomésticos. En general, las de ropa se tratan principalmente de marcas que están presentes a nivel internacional y que se instalan para trabajar con poco stock. Al ser consolidadas, arriendan un galpón o depósito en otro sector y tienen un stock mínimo en varios puntos de venta repartidos en el centro. 

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Los tipos de locales preferidos

Debido a lo anterior, se ven dos tendencias. Las empresas grandes o multinacionales -como Starbucks- están prefiriendo locales de 90 m2 a 250 m2, ya que optan por tener varios puntos de venta en diferentes barrios de la ciudad al ser industrias consagradas. “Por ejemplo, van a Punta Carretes, a lo que es centro, La Blanqueada o La Unión, para llegar a los diferentes públicos objetivos que tienen”, mencionó Medina. 

Estas compañías en ocasiones piden mes de gracia o rebaja al comienzo del alquiler, y se ha observado que los propietarios aceptan porque toman en cuenta que por lo menos tendrán cinco años con arriendo asegurado, además de las mejores que suelen hacer los arrendatarios antes de estar operativos. “Temas de baños, pisos, infraestructura, los mejoran tanto que se vuelven atractivos”, añadió el vicepresidente. 

Por otra parte, empresas medianas o pequeñas eligen unificar sus labores para no pagar tanto alquiler, sobre todo porque el 60% de sus ventas son online, por lo que arriendan un solo lugar de alrededor de 500m2. Así, la mayoría hizo un marketplace digital, con una fuerte presencia en redes sociales, pero a la vez tienen en el mismo lugar un showroom con el depósito del stock. 

Apuestan a la venta digital con solo un punto, ya que el arriendo significa un gasto importante, sumado a mes de garantía, personal, entre otros. 

“Este tipo de empresas generalmente alquilan, no compran locales, sobre todo porque las personas de 40 años hacia abajo ni siquiera van de manera presencial; compran por Internet y pagan el envío a su domicilio”, explicó el ejecutivo. 

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Iniciativas para fomentar la ida al centro

Medina comenta que las autoridades llevan un tiempo ofreciendo iniciativas para fomentar las idas al centro, debido a la preferencia de comprar en línea. Por ejemplo, un día a la semana no se cobra el estacionamiento tarifado y se descuenta el IVA, que es de 22%, por lo que es común que las personas esperen la instancia para realizar grandes compras.

“Eso ayudó a que los negocios sean más atractivos para que las personas físicamente vayan a los locales. Comenzó antes de la pandemia, y ahora se está replicando en otros barrios porque otros comerciantes lo piden”, añadió. 

Otra medida que han tomado es para ayudar a los peatones que no manejan a tener visitas más agradables. Así, cortan la calle para que no ingresen vehículos, y realzan la oferta gastronómica para ayudar al consumo de los locales. 

Sin embargo, han notado que a pesar de las medidas, existe una gran brecha entre los distintos grupos etarios. “Los jóvenes cada vez concurren menos de forma presencial y hay una realidad tecnológica que va por encima de las políticas que puede hacer el Estado, porque culturalmente hay una brecha importante”, añadió.

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