UE busca reavivar sus descuidadas relaciones con América Latina

Por Michael Stott e Ian Johnston

La Unión Europea (UE) está buscando reavivar las relaciones con América Latina en una cumbre con los presidentes de la región que se celebrará esta semana, pero los retrasos en los acuerdos comerciales y las desavenencias por la guerra de Ucrania han puesto de manifiesto sus diferencias políticas tras ocho años sin una reunión al más alto nivel.

La UE, preocupada por el creciente poder económico de China en una de las mayores regiones exportadoras de productos básicos del mundo, y deseosa de asegurarse el suministro de minerales esenciales, quiere convencer a los dirigentes latinoamericanos y caribeños de que ambos bloques son socios naturales.

Pero un acuerdo comercial clave entre la UE y el bloque sudamericano Mercosur sigue estancado y el presidente ucraniano, Volodymyr Zelenskyy, no intervendrá en el acto de dos días. Aunque ha aparecido en foros recientes, desde la Liga Árabe hasta la cumbre de la OTAN, algunas naciones latinoamericanas bloquearon la idea de invitarlo a hablar en Bruselas.

Brasil y México son partidarios de una posición más neutral en la guerra de Ucrania, mientras que Cuba y Venezuela son estrechos aliados de Moscú. Muchos gobiernos de la región preferirían que Europa presionara más en favor de las conversaciones de paz en lugar de suministrarle más armas a Kiev.

Durante las incómodas discusiones previas a la cumbre, algunos países latinoamericanos intentaron eliminar del borrador de texto la condena a la invasión rusa de Ucrania y trataron de añadir una petición de compensaciones por la trata transatlántica de esclavos, lo cual un diplomático de la UE calificó de "provocación".

La reunión del lunes se produce un mes después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, realizó una gira por América Latina en la que se reunió con los presidentes de Brasil, Argentina, México y Chile. Prometió más financiación por parte del programa europeo de infraestructuras Global Gateway, aunque las sumas se ven empequeñecidas por la magnitud de los préstamos chinos a la región. "Europa está regresando a América Latina", anunció.

Los países latinoamericanos han acogido de buen grado la mayor atención que les está prestando Europa, pero han expresado su preocupación por el hecho de que la agenda inicial de la cumbre parece estar diseñada alrededor de los intereses del Viejo Continente, como la obtención de minerales esenciales, en lugar de abordar sus grandes problemas, como la pobreza y la desigualdad.

Boric llega a Bruselas para Cumbre Celac-UE, donde abordará los desafíos de la transición energética"Es bastante ingenuo y arrogante", dijo un funcionario latinoamericano de alto nivel. "Están diciendo: 'Ahora les vamos a prestar atención porque de repente hemos descubierto que necesitamos amigos y queremos proyectar poder'".

Los diplomáticos de la UE admitieron que los preparativos para la cumbre no habían sido fáciles, pero se mostraron optimistas. "El nivel de asistencia de los líderes latinoamericanos será muy bueno y el diálogo ha sido positivo", dijo un alto funcionario. Los diplomáticos europeos dijeron que esperan organizar reuniones similares cada dos años, lo que permitiría mantener debates más regulares al más alto nivel sobre comercio, clima y desarrollo.

Un segundo diplomático de la UE dijo que la visita de von der Leyen a América Latina había creado un "buen clima" y que el acuerdo comercial con Chile, acordado el año pasado, se enviará pronto a los Estados miembros para su ratificación.

Pero pocos esperan avances esta semana en el acuerdo comercial UE-Mercosur. El pacto, firmado en 2019 tras dos décadas de negociaciones, no ha sido ratificado porque los Estados miembros de la UE temen que alimente la deforestación.

El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, reiteró la semana pasada que las exigencias medioambientales adicionales al Mercosur, encabezadas por Francia, eran "inaceptables" porque les impondrían sanciones a los países del Mercosur que no acataran los compromisos climáticos. Argentina ha respaldado su postura.

"No es una propuesta de buena fe. La forma en que se presentó es totalmente inapropiada", dijo Celso Amorim, principal asesor de Lula en materia de política exterior.

Los grupos comerciales Business Europe y la Confederación Brasileña de la Industria han advertido entretanto de que India y Corea del Sur han superado a Brasil en las dos últimas décadas en la lista de principales socios comerciales de la UE, mientras que el bloque ha pasado de ser el mayor socio comercial de Brasil a ser el tercero.

"Para nosotros, la cumbre sería exitosa si produjera acuerdos de libre comercio", dijo Eleonora Catella, subdirectora de relaciones internacionales de Business Europe.

Las crecientes ambiciones globales de Uruguay están sacudiendo las bases del Mercosur

A pesar del deseo declarado de la UE de reforzar las relaciones, algunas de sus propuestas carecen de peso económico. En la cumbre se presentará una lista de unos 100 proyectos de Global Gateway, según el alto funcionario de la UE, pero muchos carecen aún de financiación.

Durante la visita del mes pasado, Von der Leyen elevó de 6 mil millones de euros a 10 mil millones de euros el compromiso de la UE en subvenciones y préstamos para el periodo 2021-2027. Pero esto palidece en comparación con los 150 mil millones de euros dedicados a África en el marco del plan. Por su parte, China le concedió a América Latina y el Caribe préstamos para la financiación del desarrollo por un total de US$ 136 mil millones entre 2005 y 2022.

Algunos líderes invitados también pueden resultar problemáticos para la UE. Es probable que asista el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, que ha presidido el encarcelamiento de cientos de activistas de la oposición, dijeron los diplomáticos. No se espera que asista el presidente venezolano, Nicolás Maduro, que actualmente está siendo investigado por la Corte Penal Internacional por presuntos crímenes de lesa humanidad.

Más de 170 activistas de la oposición nicaragüense y grupos de la sociedad civil les pidieron el viernes a los presidentes que participan en la cumbre de Bruselas que discutan el dramático deterioro de los derechos humanos en Nicaragua, donde el presidente Daniel Ortega ha encarcelado, torturado y expulsado a opositores.

Cuba y Venezuela han denunciado públicamente a la UE por "comportamiento manipulador y falta de transparencia" de cara a la cumbre, acusando a Bruselas de intentar organizar actos paralelos sin contar con todas las naciones invitadas.

Tras los desacuerdos entre la UE y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), integrada por 33 países, sobre el extenso texto de la cumbre, los Estados de la UE están presionando para que se redacte un documento más escueto y menos polémico, pero en el que se siga mencionando a Ucrania.

Pero Javi López, eurodiputado socialista español que preside la delegación del Parlamento Europeo en la asamblea parlamentaria euro-latinoamericana, insistió en que, tras años de abandono, "la participación es un éxito en sí misma. La cumbre no es un puerto de llegada, es un puerto de partida. Es el comienzo del relanzamiento de nuestras relaciones y vínculos".