CEO de Rankmi: “Se necesitan mecanismos de visa más rápidos entre países para poder invertir”

A solo días de dar inicio formal al segundo semestre de este año, desde el mundo del emprendimiento comienzan a hacerse balances del período transcurrido y proyecciones sobre lo que está por venir para el cierre del año y para 2024.
Ha sido un ejercicio complejo, con los rezagos de la pandemia y el impacto de la inflación y las alzas tasas de interés que han estresado -por sobre todo- el clima para los venture capital.
Pero, la tendencia restrictiva parece estar quedando atrás o al menos el apetito ha vuelto, aunque con un nuevo foco.
“Los fondos hoy están un poco más retraídos y están arriesgando menos; y eso creo que se va a estar un tiempo más, por lo menos hasta entrado el 2024”, contó Enrique Besa, CEO de Rankmi, en Conexión América de DFSUD.
“Para levantar capital tiene que existir una razón de peso que lo respalde, porque eso obviamente te diluye como empresa; es la manera más cara de financiarte”, dijo.

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A su juicio, debe existir un plan agresivo de crecimiento o una oportunidad de negocio que requiera capital. “Los fondos están siendo mucho más exigentes en esa revisión y buscan ojalá empresas que estén un poquito más avanzadas en facturación y en demostrar que pueden generar flujos, crecimiento y a su vez ir siendo rentables”.
Las proyecciones que hace el ejecutivo, que hace unos meses llegó a México con la fusión con la local Osmos, son positivas. “El ecosistema va a seguir creciendo y vamos a verlo más robusto en la medida en que hayan fundadores que logren traducir los esfuerzos en casos de éxito, como ventas o salidas a bolsa".
Eso sí, reconoció que aún hay camino por recorrer, especialmente en el tema regulatorio y de permisos para impulsar las inversiones. “Se necesitan, y sería increíble, más mecanismos de visa más rápidos entre países para poder invertir. Creo que vamos en el camino correcto, pero falta”, comentó.
El desafío, entonces, está en “buscar cómo juntamos más la región para facilitar un poco la creación de negocios digitales de gran escala”.

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El uso de la IA

Consultado respecto del desafío que ha empezado a significar el uso de la inteligencia artificial para las empresas y, en especial, para las startups que están basadas en la tecnología para ofrecer sus soluciones, Besa coincidió con la teoría de que "es algo que llegó para quedarse" y que la mejor manera de subirse a la ola es adaptando las regulaciones a la velocidad de los avances de la industria. 

"La inteligencia artificial de alguna manera va enseñándose a sí misma y cuando se parametriza o se hacen modelos, ellos se van haciendo más inteligentes y más predictivos", indicó.

Y dijo que empresas como Rankmi -que de hecho está aplicando Chat GPT para su negocio- quieren "estar ahí, en la cresta de la ola,  entregando tecnología".

Por ello, su mirada está puesta en los distintos debates que se están abriendo en esta materia, "sobre cómo se legisla, cómo se utiliza, las regulaciones". "Va a haber con mucha discusión, porque muchos de los modelos que se están utilizando son abiertos en el sentido de que uno le da la información al sistema y eso queda disponible para otro. Entonces, de alguna manera igual, se está entregando información privada, si es que trabajas con ese sistema", contó. 

Esto "va a ser entretenido, muy político, pero esto no hay manera de pararlo tampoco. Entonces, va a ser difícil regularlo, va a haber mucha discusión, pero lo veo, personalmente, como un campo de difícil regulación".