Elecciones en Argentina: escasez de arriendos y valores por las nubes, la otra cara de la crisis

Argentina elige nuevo presidente este domingo, con la que busca destrabar una de las crisis económicas más severas de la historia reciente.

Eso sí, el país no solo enfrenta una fuerte devaluación de la moneda, una caída de la actividad económica, el aumento de la pobreza y una inflación anualizada de tres dígitos, sino que además atraviesa una propia crisis en la industria inmobiliaria.

En el mercado explican que la situación se desató una vez se promulgó la Ley de Alquileres en 2020 y que, tras un prolongado debate, se reformó en octubre de este año. La nueva normativa estableció que los contratos de arriendo tienen una duración de tres años, con reajustes semestrales adecuados al promedio de la inflación del último año y del 90% de la variación salarial durante ese período.

Bajo estas condiciones, los propietarios se resisten a firmar contratos de largo plazo y con variaciones de precios que no alcanzan a estar por sobre el IPC.

Por tal motivo, muchos inmuebles han salido de la oferta. Otros, en tanto, se han dolarizado o reinventado para funcionar para cortas estadías en plataformas como Airbnb.

Esto ha hecho que la disponibilidad de viviendas se reduzca drásticamente.

De acuerdo a un informe de la plataforma Reporte Inmobiliario, solamente la oferta de departamentos en Buenos Aires durante octubre ha caído casi un 75% respecto a 2022 y en comparación a septiembre bajó en un 14,3%.

El mismo documento dio cuenta que en octubre sólo habían 532 unidades disponibles para alquilar en el mercado.

Con este nivel de escasez, los precios han escalado. El último informe de la Dirección de Estadística y Censos del gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires dejó en evidencia que durante el tercer trimestre se experimentó una alza histórica en los precios de los arriendos. Los incrementos promediaron un 204,8% para los departamentos de un ambiente.

Para los de dos ambientes, el alza fue de 212,5% y para las unidades de tres áreas fue de 193%.

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Las promesas

La crisis inmobiliaria ha prendido las alertas en la industria financiera. Un informe del economista de BBVA Research, Mario Ipaguirre, advirtió que “el acceso a la vivienda sigue siendo un desafío preocupante. A pesar de la baja de sus precios, aún es lejana la posibilidad de adquirir una propiedad y priman los incentivos a su construcción”.

Las cifras expuestas por la firma dan cuenta que el nivel de créditos hipotecarios en Argentina ha llegado a mínimos históricos “pues se ha vuelto inalcanzable para quienes más lo necesitan”.

La estimación para 2023 es que finalice con montos otorgados en préstamos hipotecarios por parte de la banca en cerca de 2.500 millones de pesos argentinos, la cifra más baja en una década.

Con miras a largo plazo, el reporte dio cuenta que “creemos que el problema de acceso a la vivienda persistirá en la medida en que no se implementen políticas sostenidas en el tiempo enfocadas en el déficit habitacional”.