El Pacto de Mayo, más allá del acto político: reformas, caída del gasto público y levantamiento del cepo

Un verdadero logro político fue el que alcanzó en la madrugada de este martes el Presidente de Argentina, Javier Milei, al firmar el llamado Pacto de Mayo con 18 de los 24 gobernadores del país.

Se trata de un pacto propuesto en marzo pasado -que debió firmarse en el quinto mes del año- y que contempla compromisos en 10 políticas “refundacionales”, entre las que destacan aspectos como la inviolabilidad de la propiedad privada, el equilibrio fiscal innegociable, la reducción del gasto público a niveles históricos; reformas en lo tributario, laboral y previsional; y la apertura al comercio internacional.

El objetivo último, dijo el mandatario libertario en una de las noches más frías del país, “sacar a Argentina adelante”. 

“Llegar a un peso del Estado razonable requiere que todos los niveles del Estado hagan su parte”, afirmó, y agregó que la nación ya demostró el “compromiso”, al hacer en 2024 “la reducción de gasto más grande de la historia”. 

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¿Solo un acto político?

Para algunos expertos, la firma de este acuerdo fue solo una manera de encontrar apoyo político con miras a las legislativas de 2025, pero su verdadero alcance se empezará a ver tan pronto como en los próximos meses, cuando se empiecen a presentar las nuevas leyes y reformas previstas en el compromiso.

El economista jefe de BlackToro, Fernando Marengo, apuntó a DFSUD que lo firmado “es una enumeración de políticas de Estado de largo plazo, pero en la práctica afecta poco la situación de las provincias porque todo deberá pasar por el Congreso”.

En esa línea, Jorge Ingaramo, economista argentino y exfuncionario del Ministerio de Economía del país durante el mandato de Mauricio Macri, advirtió que “las reglas del juego las pone Javier Milei y los gobernadores solo se ponen para la foto”.

La razón detrás de ello está en que, desde el Ejecutivo, hay duras críticas respecto de la responsabilidad de los gobiernos locales, especialmente en materia de contrataciones. Milei, dijo Ingaramo, fue duro al señalar “el exceso del empleo público en las provincias en comparación con la nación”.

“Eso pudo no caer muy bien entre los gobernadores, que tienen que cumplir con el compromiso de bajar el gasto público y los impuestos", comentó. 

Por su parte, el CEO de Carta Financiera, Miguel Angel Boggiano, consideró que las provincias se verán beneficiadas a largo plazo, si el Pacto de Mayo logra resultados positivos. “Habrá más crecimiento, más libertades y menos pobreza”, aun cuando reconoció que eso llevará tiempo.

“Una vez que se lleve a la práctica tendremos una reforma previsional, otra impositiva, una laboral, tendremos estimulación a la minería y el gasto público disminuirá en un 25% del PIB con la reforma al Estado. Eso es monumental”, concluyó.

El tema del gasto público estuvo en gran parte de los titulares de la jornada, pues implicaría llevarlo a los valores más bajos en 20 años.

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Elecciones y cepo

Parte del objetivo del Pacto de Mayo es el respaldo político y los acuerdos para las elecciones legislativas, donde el Gobierno busca ampliar presencia en el Congreso.

Ingaramo enfatizó que “las adhesiones (18 de 24) son relevantes”. Sin embargo, para Marengo, los puntos firmados “no tienen nada vinculante; es más bien un compromiso de apoyo las reformas que se quieren hacer”. 

A su juicio, “el Gobierno buscó solo un espaldarazo a su gestión. Es más importante la Ley Bases o el DNU que el Pacto de Mayo”.

Una vez logrado ello, Milei empezó a dar luces de qué se viene hacia adelante: una desregulación del sector aéreo y el levantamiento del cepo. 

Sobre este último punto agregó una nueva condición llevarlo a cabo. Repitió que hay que “terminar con los pasivos remunerados” y “con los PUTs” -como ya han explicado- y dijo que será necesaria “la convergencia de la inflación con la de devaluación en un entorno cercano a cero mensual”.

Esto causó sorpresa, pues no se había introducido hasta el momento. 

El viernes, el Instituto Nacional de Estadísticas difundirá el dato de inflación de junio, que se espera haya subido levemente respecto de mayo, cuando anotó 4,2%.

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El gran perdedor

Ingaramo insistió que “el gran perdedor es (Mauricio) Macri y el PRO que está prácticamente diluido”, tras la fractura con Patricia Bullrich.

Asimismo, advirtió que “el humor social está empezando a resquebrajarse; ya no es prioritaria la inflación y empiezan a surgir demandas como el nivel de desempleo, los despidos públicos, la falta de crédito, la falta de actividad económica y en ese sentido tiene que implementar las medidas. Si el pacto es fundacional o no, el tiempo lo dirá”.

Explicó que muchos gobernadores “harán los cambios, pero esperando su desgaste para ganar en las elecciones que vienen… Aunque falta un año para el proceso electoral de medio término y falta una reforma política que falta por concretar (eliminación de las PASO)”.

En tanto, para Boggiano, el apoyo de los 18 gobernadores podría reflejarse en el Congreso y se verá en el apoyo a las reformas que se requieren para concretar el Pacto.

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Implementación 

Antes de implementar el Pacto, para Ingaramo, lo que hay que hacer es aplicar lo que ya está aprobado por el Congreso “que no es poca cosa, y requerirá tomar algunas decisiones costosas como la de privatización de Aerolíneas Argentinas, que tendrá un gran costo porque los gremios son muy fuertes”. 

Asimismo, añadió que luego de esto “veremos cuánto cumplen los gobernadores del compromiso firmado porque se nota claramente que aparecen tasas y retribuciones por servicios que no se prestan en casi todos los municipios y las provincias y el recorte de los envíos a las cajas previsionales que no fueron transferidas afectará las finanzas públicas provinciales”.

En ese sentido, Marengo advirtió que a pesar de que se ve posible superar la discusión en el Congreso por el apoyo de los 18 gobernadores, “la batalla es diferente” en el Parlamento.

Para el experto, la única buena noticia es que “una parte importante de la sociedad se puso de acuerdo en políticas de Estado, algo que es indispensable en Argentina para sostener el crecimiento”.