Mendoza, la provincia argentina con potencial energético y minero, que "necesita estabilidad macroeconómica"

La provincia de Mendoza siempre ha destacado por su turismo vitivinícola y el desarrollo de la agricultura; sin embargo, en los últimos años ha estado tratando de impulsar otras áreas de desarrollo, tal como la energía y la minería.

Al respecto, el gobernador Alfredo Cornejo en entrevista exclusiva con DFSUD comentó que Mendoza tiene una economía diversa.

"Somos agricultores; productores de bebidas en general, de vino en particular; de energía, porque hemos tenido petróleo, particularmente la destilería de Luján de Cuyo que procesa combustible y es la segunda destilería de la Argentina; somos productores de energía hidráulica; de energía solar y en este momento estamos con inversiones de US$ 800 millones. Tenemos un desarrollo incipiente de las industrias del conocimiento; y, además somos un polo logístico gracias al paso a Chile, pero no desarrollamos minería metalífera", dijo.

Justamente, esto último es lo que quiere reflotar la provincia. "Queremos hacerlo porque tenemos cobre en cantidad, compartimos toda esa faja de cobre que está explotándose en Chile, que tiene mucho para para explotar y queremos empezar a hacerlo aprovechando la ventana de oportunidades de necesidades minerales críticos para la transición energética".

Parte importante para lograr esto se relaciona con los permisos mineros, que en Argentina los dan las provincias, por ende, la legislación local se vuelve "más relevante, al igual que nuestro rol como gobierno porque Mendoza ha sido reticente al desarrollo de la minería.

"Pero creo que eso está cambiando paulatinamente y la sociedad está valorando que hay minerales que pueden salvar el planeta", agregó.

Esta distancia con los proyectos mineros se relacionan con las restricciones que se le han puesto a los proyectos mineros por algunas sustancias que están prohibidas, pero -dijo- actualmente "Mendoza viene aprobando todos los proyectos con bastante apoyo y ya hay seis que han sido aprobados, de los cuales tres o cuatro ya están en un proceso de exploración", destacó.

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Impulso de cambio en el timón

Este cambio en la burocracia de la provincia argentina responde a la ventana de oportunidades que entrega la demanda de minerales críticos. "La necesidad de cobre y litio para mejorar el ambiente también la presenta un gobierno nacional nuevo que es proinversión, pro sector privado y pro estos proyectos", comentó la autoridad.

En ese sentido, enfatizó que "ese es un cambio sustantivo" para atraer las inversiones, ya que en su mayoría son impulsos privados.

Además, la ventana dejó a la vista que no alcanza solo con una agricultura competitiva ni con el turismo, que ha crecido mucho en la última.

Respecto del turismo argumentó que ha sostenido el empleo privado y "ha sido un cambio muy positivo, pero no alcanza. No alcanza solo con la agricultura, no alcanza con la agroindustria, no alcanza con la producción de alimentos, no alcanza solamente con nuestras nuevas industrias del conocimiento, sino que hay que agregarle valor con energía, volvernos hacer más energía de la que ya hacíamos".

Específicamente sobre este sector, el gobernador comentó que "Mendoza tiene mucho potencial en energía solar, es limpia y tenemos una serie de ventajas comparativas, pero también podemos extraer cobre".

Consultado sobre dónde estará el mayor foco de las inversiones provinciales, enfatizó que "estará puesto en las cuatro actividades principales: turismo; agricultura y agroindustria; producción de bebidas y de alimentos; y, también en la extracción de cobre o minería sostenible".

En cuanto a la energía solar explicó que pueden sumar más millones en inversiones a los US$ 800 millones que ya están presente en Mendoza a través de proyectos solares que son privados. En ese sentido, destacó la reciente inauguración de la línea de alta tensión, Cruz de Piedra, de US$ 20 millones en inversión, así "el transporte de esa energía de solar también es parte de nuestro, de nuestro proyecto".

Finalmente, enfatizó que en Mendoza desarrollaron un plan a 30 años que, independiente de la autoridad, hay un plan que lo estará sosteniendo el sector privado, que lo financiará el sector privado de otras actividades, no solo de la agricultura o de la vitivinicultura, también de la metalmecánica y otras industrias de la provincia".

"No hay espacio para crecer"

De acuerdo con Cornejo, la provincia está dependiendo "mucho" de las condiciones macoeconómicas del país. "Creemos que hay una ventana de oportunidades, pero no hay espacio para crecer", y aunque el Régimen de Grandes Inversiones (RIGI) que aprobó el Congreso es una oportunidad para Mendoza como productor de energía, su dependencia del desempeño de la Nación impacta en su desarrollo, consideró la autoridad.

En línea con esto, detalló que "lo que beneficia a todas las provincias es que se estabilice la macroeconomía con alta inflación y con una tasa de inversión muy baja".

En ese sentido, explicó que "algunas provincias tienen potencialidad, pero hay proyectos que requieren integración regional y binacional, tal como el hidrógeno verde".

Este potencial al que se refiere el jefe provincial son las 150 empresas que están trabajando como proveedores de mercados vecinos como Chile o Perú. "Hay un cluster en Mendoza que ya existe. Hay universidades de petróleo, universidades de energía, hay facultades y academias, hay formación y recurso humano y eso atrae proyectos. Es una condición sine qua non".

"Mendoza lamentablemente no goza de commodities en cantidad, lo que lo hace más dependiente de que la estabilidad macroeconómica brinde garantías para que le vaya bien. La historia económica de Mendoza muestra que cuando Argentina ha estado estable macroeconómicamente, hemos crecido más que la nación", enfatizó.

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Interés minero

Consultado Cornejo respecto del interés de compañías mineras de invertir en Mendoza, contabilizó a "empresas americanas, australianas, canadienses e incluso chilenas. Algunas de ellas se han inscrito y han comprado permisos en Mendoza, fundamentalmente en cobre".

Sin embargo, para el líder del gobierno provincial, nada de esto es suficiente si no hay estabilidad macroeconómica, lo cual también es un desafío. "Estoy convencido que Mendoza va a crecer más que el resto del país, (...) el requisito sería estabilidad macroeconómica".

Durante la jornada, el gobernador Cornejo sostuvo varios encuentros en salas de la Embajada de Argentina, entre ellos con María Florecia Attademo-Hirt,  gerenta para el Cono Sur del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y sus representantes en Argentina y Washington, con quienes dialogó sobre la política minera que se está desarrollando en su localidad y el nuevo panorama de inversiones para potenciar esta industria.

"Es necesario trabajar en forma integrada con Chile y expandir a nuestra región su trabajo en materia de infraestructura y de sustentabilidad. Existe la oportunidad de explorar diversas líneas, tanto en financiamiento como en asistencia técnica, aprovechando la experiencia de otros países donde el BID ha contribuido al desarrollo exitoso de políticas mineras. Ese compromiso renovado con la minería, impulsado por la transición energética a nivel mundial, crea nuevas oportunidades para avanzar en este ámbito", comentó el representante mendocino.

Respecto de Chile, señaló que "tenemos una gran admiración por el país, por cómo lo ha hecho por más de 150 años y todo lo que tenemos para aprender allí, desde nuestra inestabilidad económica de los últimos años y la alta tasa de estabilidad económica de Chile nos hace pensar que San Juan, Mendoza y otras provincias limítrofes podrían producir muchísimo cobre con mayor rapidez y estaremos exportando mucho más".