Credicorp revela su camino de expansión en microfinanzas en la región

En el marco del seminario “Líderes en acción: Inversiones 2022, los negocios que mueven América”, realizado por DF Sud, el CEO de Grupo Credicorp, Gianfranco Ferrari, fue enfático al señalar que uno de los focos de la compañía durante 2022 estará puesto en el desarrollo de su área de microfinanzas. “El crédito más caro que existe es aquel que necesitas, pero no puedes acceder”, dijo el ejecutivo. 

A raíz de eso, “estamos haciendo inversiones bien importantes, no solamente en microfinanzas, sino sobre todo en inclusión financiera, porque lo que creemos que una manera de hacer negocio, pero a la vez, a la vez ayudar al desarrollo de nuestros países es incluir más personas al sistema formal financiero”, declaró.

La compañía logrará estos objetivos por medio de la tecnología, ya que esta permite que el costo de distribuir, por lo tanto dar acceso al crédito, sea mucho menor. 

MiBanco en Perú y Colombia

“Lo que estamos haciendo en “MiBanco” ya en Perú, y desplegándolo y empezando a probar en Colombia, es justamente cambiando el modelo de microfinanzas y esto es lo realmente novedoso, donde estamos pasando de un modelo que dependía solamente de personas visitando a potenciales clientes, a una combinación entre personas, apalancándose en la tecnología”, enfatizó Ferrari.

A esto se refiere con el hecho de que la productividad de esas personas sea mucho mayor y por ende se pueda llegar a más potenciales clientes en este segmento, que normalmente ha estado desatendido o sub atendido en la región.

En Perú, a través de Credicorp Capital espera incluir 3 millones de personas al sistema financiero en 2022.

Para la entidad financiera, 2022 será un año normal, mientras que pensando en 2023, “estamos muy positivos en el negocio de microfinanzas, es algo que queremos tomar”.

Esta división, representa el 10% de las utilidades de la compañía. “Creemos que hay una oportunidad de crecimiento importante en diferentes países de Latinoamérica, desarrollando el modelo que hemos hecho para “Mi Banco” en Perú y que lo estamos desarrollando en Colombia”, apuntó.

La compañía lo que busca es crecer en este mercado y en esta división de negocios. Es por esto que “en Colombia ya tenemos el 10% del mercado de microfinanzas, y quisiéramos tener algo así como el 20%, o sea como duplicar ese tamaño. Y luego de consolidar Colombia, sí nos gustaría ir a otros países porque creemos que podría ser sin duda eso”.

México como próximo destino y Chile en observación

Tal como señaló Ferrari, luego de la consolidación de su operación en Colombia, la compañía busca alcanzar nuevos mercados. Uno de estos sería México, ya que “es un mercado súper atractivo para las (microfinanzas). Y en Chile, sorprendentemente, también hay un espacio de mercado, pero que habrá que estudiar”, apuntó.

Pero claramente, para Credicorp México es una oportunidad “más atractiva”, al menos, “por ahora”.

La firma busca con las microfinanzas mejorar la inclusión financiera en los países donde opera.

Guerra: presionará la inflación

Ninguna compañía está indiferente a lo que sucede en el exterior, específicamente la guerra entre Rusia y Ucrania, que ya casi completa un mes. Al respecto, el CEO de Grupo Credicorp lamentó lo que está sucediendo en ambas naciones, y “en esa línea creo que en estas guerras nunca hay ganadores y todos somos perdedores”. 

En esa línea, pero con enfoque económico, Ferrari planteó que los impactos “son en dos sentidos. Hay sin duda impactos positivos, pero también negativos. Hace unos días se veía el precio del cobre llegando a US$ 5  la libra. Para Chile y Perú el precio del petróleo también está muy alto, lo que beneficia a países en la región como Colombia, Brasil, Ecuador. Claramente a países como Chile y Perú nos perjudican”.

A esto se suma la crisis generada por la pandemia, por lo tanto, estimó que “la guerra nos va a generar más inflación en el mundo y eso creo que nos impacta a todos. Y no solamente nos impacta desde el punto de vista macro a nivel país, sino desde el punto de vista sobre todo micro a nivel de cada uno de los ciudadanos que estamos en nuestros países”.

Además, en un contexto donde las tasas de interés de los bancos centrales de los países venían al alza, el ejecutivo espera que el ritmo de aumento en adelante sea más lento, "porque me parece que los bancos centrales van a ir monitoreando el impacto de una posible recesión producto de la guerra".

"Hay un poco más de cautela desde el punto de vista monetario", dijo.

Política regional

Junto con esto, a nivel regional, Ferrari abordó el nuevo panorama político de la región, donde gobiernos de izquierda han ido asumiendo en países como Chile y Perú, y -según las encuestas- Colombia también podría ser el caso. "La izquierda moderna en el mundo ya no es lo quera en los 50,60 o 70... creo que todas las izquierdad, centros y derechas nos hemos dado cuenta que hay ciertos pilares macroeconómicos que debemos respetar por la sostenibilidad en el largo plazo de los países y por lo más importante, la sostenibilidad y la mejora en la calidad de vida de las poblaciones de esos países”. 

Entonces, en línea con esta visión, Credicorp que es positivo de que “hay fundamentos económicos, políticos y sociales en los países donde operamos, que creemos que nos hacen ser positivos con respecto al mediano plazo en la región”.

Pero bajo el contexto actual, con una guerra de por medio, con altas tasas de inflación en la región, “tenemos que acostumbrarnos a vivir en un nivel de incertidumbre mucho más alto que el que vivíamos antes. Ahora, esa incertidumbre que genera normalmente ansiedad, preocupación, etcétera, también genera oportunidades”.

Estas oportunidades y también desafíos están puestos en el tema de salud, esto porque “claramente la pandemia ha evidenciado que el sistema de salud no es suficiente. No está acorde a las necesidades de lo que pide un país medianamente desarrollado o países medianamente desarrollados como los latinoamericanos”.

Otro punto de encuentro es el sistema de pensiones, porque “hay un tema en común entre educación y pensiones, que como Latinoamérica, no podemos dejar pasar una oportunidad de oro”, pero todo esto tiene que ser bajo una agenda de mediano y largo plazo.

Junto con esto, subrayó que “jubilar a los 60 o 65 o lo que sea, es un paradigma. La edad es un número. Yo creo que lo importante es la empleabilidad de la persona y la empleabilidad de la persona se asegura o se mantiene en la medida en que esa persona tenga los talentos, las capacidades adecuadas para ese momento de la economía, de lo que la demanda requiere”.

En ese sentido, otro tema relevante para la región es la fuga de talentos, más que de capitales. ”Me preocupa mucho más la fuga de talento y el poco acceso al talento, que no necesariamente lo vamos a pagar, esa factura, como país o como ciudad no la vamos a pagar en el corto plazo, pero sin duda la vamos a pagar en el mediano plazo. Y ahí es el tercer frente donde yo creo que tenemos una tarea pendiente”, señaló.