Caputo anuncia medidas económicas: el tipo de cambio oficial pasará a 800 pesos, se reducen ministerios y se pone fin a las licitaciones públicas nuevas

Con dos horas de retraso, en medio de rumores de regrabación del mensaje oficial, de problemas técnicos y mucha especulación, el recién estrenado Gobierno de Argentina dio a conocer las tan esperadas medidas económicas que permitirán hacer frente a la severa crisis.

El vocero encargado fue el ministro de Economía, Luis Caputo, quien centró el mensaje en 10 acciones que, a su juicio, permitirán “erradicar nuestra adicción al déficit fiscal” al que ha estado acostumbrado el país por décadas.

“Si seguimos como vamos, vamos inevitablemente camino a una hiperinflación. Nuestra misión es evitar esa catástrofe (...) La génesis de nuestro problema siempre ha sido fiscal”, dijo.

Y agregó: “Lo que venimos a hacer es a solucionar este problema de raíz, justamente para no tener que padecer más inflación, más pobreza”,

Eso sí, reconoció y adelantó que “vamos a estar durante unos meses peor que antes, particularmente en términos de inflación”.

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Las 10 medidas

Caputo enumeró las medidas “que componen este paquete de urgencia, cuya finalidad es neutralizar la crisis y lograr estabilizar las variables económicas”.

En primer lugar, dijo que no se renovarán los contratos laborales del Estado con menos de un año de vigencia. Decretó la suspensión de la pauta del Gobierno nacional por un año, luego de que en 2023 se gastaran 34 mil millones de pesos (US$ 92,7 millones) en anuncios. “No hay plata para gastos que no sean estrictamente necesarios y mucho menos para sostener con plata de los contribuyentes, medios que se crean solo para alabar las virtudes de los gobiernos de turno”.

También se reducirán los ministerios y secretarías. Los primeros pasarán de 18 a nueve, y las segundas de 106 a 54.  “Esto va a redundar en una reducción de más del 50% de los cargos jerárquicos de la función pública y del 34% de los cargos políticos totales del Estado nacional”, explicó.

Uno de los puntos más esperados era la decisión respecto del tipo de cambio.

Así, se anunció una devaluación de más del 50% al colocar el dólar oficial en 800 pesos “para incentivar la producción”. “Esto va a estar acompañado con un aumento provisorio del impuesto País a las exportaciones y a las retenciones” de los envíos no agropecuarios.

Por otro lado, habrá menos transferencias de fondos discrecionales a las provincias, que a su juicio se han usado como moneda de cambio por favores políticos; y dijo que tampoco habrá licitaciones públicas nuevas y se cancelarán aquellos desarrollos que aún no hayan comenzado.

“No hay plata para pagar más obras públicas que, como todos sabemos, muchas veces termina en los bolsillos de los políticos y los empresarios. La obra pública ha sido siempre uno de los principales focos de corrupción del Estado y con nosotros eso se termina”, lanzó Caputo.

Y agregó: “Las obras de infraestructura en Argentina serán realizadas por el sector privado”.

En cuanto a los subsidios a la energía y el transporte, anunció recortes porque -dijo- “como todos los argentinos ya se habrán dado cuenta, estos no son gratis, sino que se pagan con inflación”.

También incluyó el fortalecimiento de las políticas sociales y los planes de trabajo; el reemplazo del sistema de exportaciones SIRA con un sistema estadístico, y dijo que se duplicará la tarjeta alimentaria en un 50%.

Tras el anuncio, el titular del ente rector explicó a economistas destacados del país el alcance del paquete y este miércoles tiene previsto una reunión con todos los bancos locales y el banco central.

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La lectura

Según los analistas, el Ejecutivo buscará contener el impacto de los mercados, en especial del dólar blue que se ubicó en los 1.070 pesos.

Para el diputado de Juntos por el Cambio (JxC) y extitular del Palacio de Hacienda, Ricardo López Murphy, “el programa es estremecedor”.

Respecto del tipo de cambio, estimó necesario avanzar hacia un mercado único, como el de Chile, Uruguay y Brasil. “No escuché eso, pero tenemos que avanzar hacia allá”, señaló a La Nación+.

En tanto, desde el FMI, Julie Kozack, directora de Comunicaciones, respaldó las medidas y dijo que “estas fuertes acciones iniciales apuntan a mejorar significativamente las finanzas públicas de una manera que proteja a los más vulnerables de la sociedad y a fortalecer el régimen cambiario”.

“Su aplicación decidida contribuirá a estabilizar la economía y a sentar las bases de un crecimiento más sostenible y liderado por el sector privado”, añadió.