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La transición energética regional en ojos de la startup colombiana Bia

La compañía, que comercializa energía de forma digital, espera, en el mediano plazo, expandirse a Chile y Perú tras consolidarse en su país base.

Por María Gabriela Arteaga / Foto: Bia I Publicado: Martes 7 de marzo de 2023 I 17:36
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El sector energético global se ha venido transformando lentamente para integrar tecnologías y, con ello, han surgido empresas cuyo negocio es vender energía de forma digital.

Este es el caso de la startup colombiana Bia, que nació en enero de 2022 “con la intención inicial de comercializar, pero con la idea de fondo de transformar digitalmente a la industria, entregándole a los usuarios mucha más información y educación del consumo energético”.

Así lo explicó Natalia Gómez, vicepresidenta de Ventas de la compañía, en el espacio Conexión América de DFSUD.com. “A través de este mecanismo les entregamos (a las empresas) toda la data; como Bia entiendo su consumo energético y me vuelvo su principal aliado para consumir menos”, contó.

La ejecutiva ha sido clave en la apuesta que surgió de la mano de Sebastián Ruales y Guillermo Plaza, excolaboradores de Rappi y quienes contribuyeron al crecimiento del gigante del retail en sus primeras etapas.

Junto a Leonardo Velázquez, emprendedor con más de 22 años en el sector energético, decidieron buscar cambiar la forma en que se consume y se cobra la energía, considerando que en Colombia la ley permite pasar de prestador del servicio con la misma facilidad con que lo hace en la telefonía celular.

Rumbo a la transición

La apuesta de Bia, dijo Gómez, va en sentido a aumentar el porcentaje de avance que tiene Colombia en la materia, considerando que es el tercer país de la región con mayor crecimiento, por detrás de Costa Rica y Uruguay.

“Eso nos pone en una situación muy positiva. Hemos avanzado. Latinoamérica está en el 65% de la transición (...) Y Bia contribuye en este camino, porque tocamos una parte muy importante, que seguramente los gobiernos no han pensado hasta el momento, y es el usuario final”, señaló.

A su juicio, la discusión se ha centrado en desarrollar tecnologías para potenciar energías renovables y llevar a cabo grandes inversiones a nivel país, “pero nadie piensa en cómo el usuario final puede contribuir también de manera positiva a esto”.

Dijo que parece haberse olvidado la relación directa con el usuario, en medio de la apuesta de llegar a 2030 con un 70% de energías renovables.

“Tenemos que empezar a educar mucho más al usuario desde diferentes frentes (...) darle recomendaciones para bajar el consumo y hacerlo de una manera más inteligente”, señaló.

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El avance de Bia

A un año de operación, Bia ha enfocado su operación en usuarios empresariales, pero no descarta abarcar como siguiente paso los usuarios de hogares residenciales que puedan aportar, también, al cambio necesario en el consumo energético.

Una vez consolidado el negocio en Colombia, con alcance en todos los sectores y en todo el territorio, empezarán a apostar por expandirse. La mirada está puesta “en dos mercados muy puntuales, que son Chile y Perú ya en 2024”.

"En el momento en que ya tengamos un nivel de madurez en Colombia, con todas las herramientas desarrolladas, el mercado, entender absolutamente cada una de las industrias que hayamos llegado al usuario final, podemos replicar rápidamente en estos siguientes dos mercados", aseguró.

Mientras, apuesta por responder a los desafíos de la velocidad en el avance global de la transición energética, y de la transición energética es un hecho la educación de los usuarios finales.

"La transición energética es un hecho, pero creo que la velocidad nos está jugando en contra, porque si bien vamos todos en esa línea, nos estamos demorando mucho realmente en ver ese progreso", consideró la ejecutiva.

A su juicio, entonces, hay que acelerar la mecánica para que los gobiernos aporten con las inversiones en desarrollar tecnologías de último nivel de la mano de la educación. 

En menos de un año, la empresa está facturando por sobre US$ 1 millón en base a 1 millón de clientes ya cerrados, y espera cerrar 2023 con ingresos entre US$ 10 millones y US$ 12 millones.

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