Gobierno de Colombia define tres desafíos de política económica y revela fuerte inversión española

Una economía favorable y recuperada mostró el ministro de Hacienda de Colombia, José Antonio Ocampo, en un seminario organizado por la Asociación Nacional de Instituciones Financieras (ANIF) de su país, aunque advirtió ciertos riesgos a raíz de la inflación y el endurecimiento de condiciones financieras externas.
Por un lado, dijo que el alza de precios internamente ha golpeado a la economía local considerando las medidas tomadas por el Banco de la República para detener su efecto, pero consideró que el lado positivo es que las exportaciones se han visto favorecidas. “El auge de los precios de productos básicos después de la guerra ha resultado en mayores presiones inflacionarias”, apuntó.
Aunque estimó que “ya llegamos al peak de inflación global”, destacó que “el descenso será lento. Un ejemplo de esto es que en EEUU el mes pasado hubo un descenso de la inflación, pero sigue siendo muy alta para sus estándares”.
Junto con esto, el ministro advirtió que la economía colombiana “se desacelerará en el segundo semestre. El aumento de tasas de interés y la mayor inflación impactará en el ritmo de crecimiento en los próximos trimestres y prevemos que durante el segundo semestre habrá un crecimiento por debajo del 10%”.
En ese sentido, enfatizó que la actividad económica se mantendrá dinámica en 2022, aunque con una desaceleración en la segunda mitad, la cual “se mantendrá en 2023”.

Inversiones

Otro punto que destacó el ministro durante su intervención en el seminario fue la dinámica de los flujos de capitales que en la primera mitad del año se han mostrado estables. Al respecto, comentó que la visita del presidente español Pedro Sánchez y una comitiva de empresarios, dejó cuentas alegres para el país sudamericano.
“Los inversionistas españoles son los número uno, si restamos petróleo, en inversiones en Colombia. Durante el encuentro anunciaron US$ 1.500 millones más de inversiones directas, lo cual es un punto positivo para seguir mejorando las expectativas de inversión extranjera directa en el país”.

Desafíos de política económica

Durante el encuentro, Ocampo señaló que el Gobierno del Presidente Gustavo Petro se ha propuesto enfrentar tres desafíos.
En primer lugar, señaló que abordará las condiciones sociales débiles del país, con un mercado laboral prácticamente recuperado, pero que preocupa por los altos niveles de informalidad laboral. “Además, nos preocupa el crecimiento de la pobreza, que viene subiendo desde antes de la pandemia y que ha dejado a más de cuatro millones de personas bajo la línea de la pobreza”, explicó. Añadió que también están atentos al aumento de la desigualdad.
A esto se suma el desafío de la disminución del “alto” déficit comercial, para lo cual buscan diversificar sus exportaciones. “Aunque todos los rubros se están recuperando (...) estamos recién empezando el proceso de diversificación de nuestros envíos, pero consideramos relevante la competitividad de la tasa de cambio para el dinamismo exportador del país”, explicó.
En ese sentido, apuntó que este desafío se enfrenta con la reversión de la desindustrialización prematura de Colombia “que tiene que ver con las bajas inversiones en ciencia y tecnología, lo que yo llamo la vergüenza nacional”.
Finalmente, el tercer reto para la nueva administración colombiana tiene relación con las “débiles” finanzas públicas, lo cual será contrarrestado con la reforma tributaria que pretende completar 2 puntos del PIB a 2023.

Para enfrentar esto, el gobierno está buscando nuevas fuentes de ingresos y no descartó la enajenación de algunos activos. “Vamos a ver algunos activos si se venden no al sector privado, sino a otras empresas públicas, sobre todoen la parte energética a EPM y a la Empresa Energía Bogotá", apuntó.

Además, esta reforma permitirá enfrentar todos los desafíos que enfrenta el Ejecutivo, tanto para mejorar las condiciones sociales, como para enfrentar el déficit y robustecer las finanzas del país.